El terror del llano

tiembla pueblo que llego el terror del llano... denunciaremos a los que estan contra el pueblo y defenderemos a los pobres y desamparados

domingo, 28 de noviembre de 2010

carta abierta al viejo jose vicente rangel

Apreciado José Vicente:

En realidad no sé por dónde empezar, ni por donde terminar. Es tan dilatada tu carrera política –como candidato, diputado, ministro, canciller y como fiemo de la más alta calidad!!! Quizá no haya un político en Venezuela que se haya manejado mejor que tú –bueno, exceptuando a tu compadre Teodoro, con el que siempre tuviste relaciones cordiales. Todavía nos acordamos de tus pancartas electorales allá por el ’73. Bueno, luego, en el ’78 y en el ’83. Es tanto lo que has logrado en estas últimas décadas y cubre tantas aéreas: desde tu participación fallida en las contiendas electorales, actos innumerables de corrupción, tráfico de armas, extorsión, y crímenes de toda índole. Te acuerdas de aquellos tiempos con tu otrora socio Miquilena en el Instituto Municipal de Crédito de Caracas en los tiempos de Betancourt? Te acuerdas cuando te dio el derrame cerebral y te llevaron a casa de tu gran amigo Fidel Castro para que te recuperaras? No te preocupes –que se que todo te es indiferentemente- las nuevas generaciones y este país de frágil memoria ni se acuerdan, ni se acordaran mañana!

Pero retrocedamos un poco en la historia –que bien sabes que este país no tiene memoria. Eran los tiempos de la primera presidencia de Carlos Andrés. Estuvieron a punto de enjuiciar al Presidente –cuando había una semblanza de división de poderes- en el Congreso y milagrosamente –fue tu voto el que lo salvo. Se corría el rumor de que la DISIP de esos tiempos estaba en posesión de fotos comprometedoras de la Donna –pues es así que le gusta que la llamen, cuando no está obligando al gobierno a comprar sus esculturas a precios exorbitantes, o cuando no está cobrando comisiones por la venta de armas. Sin embargo, todos sabemos que tu perfidia no conoce límites. Juraste vengarte –con esa frialdad y calculo inveterado que siempre, siempre te ha caracterizado. Y bien que el destino colaboro contigo: fuiste el voto decisivo en el enjuiciamiento a Carlos Andrés en su segundo periodo. Por cuanto es que fue? Tan solo $200,000 dólares? Qué tiempos aquellos, verdad? Una bagatela comparada con el sistemático enriquecimiento súbito de tu entorno… Nada, ni nadie se interpone en tu camino… Si no pregúntaselo a Danilo Anderson o al señor ese que estuvo casado con una de tus descendientes. La misma que le metías por los ojos al sátrapa de Miraflores. Si utilizas a los tuyos sin ningún escrúpulos, por que debemos asombrarnos cuando dices que Brito decidió morirse en un momento muy oportuno para los intereses de la revolución? Podríamos escribir numerosos volúmenes sobre toda la estela de ignominioso actos que has dejado cual legado de oscuridad y oprobio. Te acuerdas cuando astutamente engañaste a toda Venezuela con aquel programa dominguero por Televen? Te acuerdas cuando “Cicerón” te indicaba todos los actos de corrupción de la cuarta? El venezolano promedio se levanta los domingos con dos cosas en mente: ver tu programa y leer tu columna que publicabas en El Universal… Ah!! Que tiempos aquellos verdad? Vivías en la misma casita… con el mismo carro! Tan diferente ahora: con tantas viviendas –EE.UU., Chile, etc.… (ni hablar de tu actual residencia: cerca de los campos de golf: te acuerdas de la rabieta que agarraste cuando no te dejaban entrar al club como miembro?

El tiempo avanzo y tú con tu característica frialdad y cinismo proclamabas “Todo está excesivamente normal” durante la huelga general de Diciembre 2002 – Febrero 2003. Para ti: muertes, armas, sangre, narcoguerrilla, destrucción, saqueo, injuria, calumnia, encubrimiento, cinismo son ‘excesivamente normal…” Una vez mas no nos has defraudado: “ Chávez no es un autócrata ni un dictador represivo… a diferencia de los mandatorios de la Cuarta Republica…” Y tan solo pensar que fueron los políticos de la IV quienes si supieron frenar tus desmedidas y frías ambiciones de poder, de dinero, y de venganza contra el mundo entero… Por cierto, mientras te ríes y acaricias tu gélido bigote… (y hablando de zamuros: esas lindas criaturas comparadas a tu ausencia de alma)… hay alguien que te esta ‘zamureando’ y de la cual no podrás comprar, ni engañar, ni burlar, ni jactarte de ser más astuto: la muerte! Tu muerte!

Recibe un fuerte abrazo,

EL MIEDO ES LIBRE Y AHORA ROJO, ROJITO

EL MIEDO ES LIBRE Y AHORA ROJO, ROJITO

/Iván Olaizola D’Alessandro
sábado, 27 de noviembre de 2010

Con el niño no había electricidad, ahora que el niño se orinó tampoco hay. Así se construye en socialismo.

Las últimas actuaciones públicas del teniente coronel dan mucho que pensar. Los análisis que se hacen son muy variados, pero todos concluyen en que algo raro le está pasando al susodicho. Se le nota desencajado, nervioso, más agresivo que de costumbre. Algunos piensan que no se ha recuperado de lo del 26S y más bien se le ha profundizado la crisis. El litio como que no está haciendo efecto. Las dos reuniones con Santos, las declaraciones del general Rangel y el canto de Makled, los resultados de las elecciones de la UCV, las muchísimas protestas de todos los sectores, en especial de los sectores chavistas y, según los expertos, la escasez de recursos para cumplir obligaciones, pareciese que le han hecho subir la tensión. 25-15. La inesperada y muy rara cadena del día martes, patética según muchos, en el Salón Elíptico, ataviado deportivamente en un acto donde todo su auditorio estaba encorbatado, con la intervención de una gringita mercenaria y la lectura de un documento antiimperialista un tanto contradictorio y el cierre con una intervención suya, breve por, según él, el juego Magallanes-Caracas, pero suficiente para amenazar a mucha gente. Casi un decreto de guerra a muerte. Imploró (¿?) a la sumisa Asamblea Nacional que aprobaran una ley en contra de las donaciones internacionales para la oposición, emplazó a los órganos competentes para cerrar Globovisión y la perla, la orden a los nuevos diputados para que prepararen, desde ya, los posibles allanamientos de la inmunidad parlamentaria a los diputados de la oposición. Radicalizar todo. Radicalizar a la AN. Radicalizar al gobierno. Radicalizar a la FANB. Nada de medias tintas. O eres marisco o eres molusco, dijera el chavista Joselo. Somos la extrema izquierda. Sólo le faltó decir que la misma extrema izquierda que mató policías y guardias nacionales, que asaltó bancos y secuestró personas. La misma que fue derrotada por la democracia de la IV. El camarógrafo de VTV, no sabemos si por desconocimiento o por instrucciones del director, hizo un paneo por algunos rostros presentes de los confesos y convictos de aquellos actos delictivos, ahora miembros del alto gobierno. No faltó el reiterado anuncio de que lo quieren magnicidiar. Por cierto que allí también anunció por tercera vez, el acto de acenso del nuevo general en jefe. Será que de tantos generales no consiguen soles.

Muchos sesudos analistas piensan que la gota que desbordó el vaso fue una especie de comunicado leído por Zuloaga, el de Globovisión, más caliente que plancha de chino, en el cual le dio hasta por el cielo de la boca. “Es poco hombre el que se escuda en su poder para…” “Lo quiero vivito y coleando para que rinda cuentas, no sólo en Venezuela sino también en la jurisdicción internacional…” “de golpes el experto es usted...”

Por otro lado el sirio Makled sigue con su ópera prima, ahora con auditorio gringo y Santos hecho el musiú. El agua hasta el cuello, y sigue lloviendo. Las encuestas del 5D no le cuadran. Amazonas y Guárico se incorporarán al escualidismo. En Maracaibo, el italiano Di Martino no podrá pasar el puente y la cónyuge del filósofo protegida por la Chinita. Palo por todos lados. En la OEA se quedó solo con el otro comandante. Raúl, el hermano, revisando el comunismo de la isla. Libre empresa, propiedad privada, sin libreta de racionamiento. Rumbo al capitalismo pues. Será que Castro es ahora de extrema derecha. Bono de aguinaldo mocho. Muchas casas. Prometidas claro. Se entregan las llaves pero y la titularidad qué. Pudreval bien gracias. La Policía Nacional al mejor estilo a la cubana.

Señor presidente, dijera Guillermo, el de Globovisión, por qué no deja de leer libros viejos, obsoletos, pasados de moda, y se pone a trabajar o deja trabajar a sus ineptos ministros. Señor Presidente, como dijo Guille, convénzase que ya nadie le cree un pepino, casi doce años de cuentos, de gamelote, son suficientes. Esos que protestan y dicen “es que yo soy revolucionario, pero…” es puro cuento, eso es para engordarle el ego y después reírse de usted. Iguales carcajadas se oyen en los cuarteles después del “patria, socialismo o muerte”. Y lo peor, señor presidente, como dice William, me contaron que hasta en las reuniones de gabinete, su gabinete, se le ríen a escondidas de la cantidad de pendejadas que dice. Míster president, como le dijo Bush, vea las películas que le han hecho a muchos dictadores militares, disculpen la redundancia, para que vea cómo se le paran firme y por detrás le hacen la señal de costumbre. Alas presidente, como le dijo Uribe, el dos mil siempre se le está convirtiendo en el dos mil doce.

Iolaizola@hotmail.com

Carta a Eva Golinger

Carta a Eva Golinger
CONTRAVOZ


“Si tanto les disgusta el “imperio” –a ti y a los que te bailaron el agua el martes- ¿por qué no quemaron éstos de inmediato sus visas?”, se pregunta el abogado Gonzalo Himiob

A ver Eva –me permito tutearte pues debes tener más o menos mi misma edad- quisiera hacerte llegar, sin más ánimo que el de dejar escritas mis palabras, algunos comentarios sobre lo que fue tu intervención, el pasado martes, ante nuestra AN. Y fíjate, sí digo “nuestra” AN porque no creo justo que se te cuestione el acento o eso de tener doble nacionalidad aunque la tuya sea, principalmente –pues de ésta es de la que te sirves en tus propósitos- la del “imperio” al que con tanta rabia ahora atacas desde la comodidad de los billetes que te damos, de nuestros bolsillos, los venezolanos. Yo mismo soy a la vez ciudadano venezolano por nacimiento y ciudadano español por haberlo sido mi madre, y eso no me impide en lo absoluto sentirme atado a mi país bienamado –en el que, a diferencia de ti, sí me crié- y verme obligado ante Venezuela a luchar con todo mi esfuerzo por verla libre, tolerante y feliz. Tampoco, por cierto, se lo impide a muchas personas que conozco y que, incluso sin haber obtenido la nacionalidad venezolana, han hecho de este país su tierra por elección y acá están y se mantienen insignes y dignos pese a las adversidades, luchando para acabar con la opresión que ahora nos ahoga.

Contradicciones acomodaticias

Comienzo por reconocerte que cuando cuestionas el intervencionismo norteamericano y criticas algunas de sus políticas foráneas no te falta algo de razón. Es cierto, la historia está llena de eventos en los que desde el norte se ha pretendido marcar las pautas de actuación de otros pueblos, no siempre de manera luminosa. Pero te acoto que ninguna potencia mundial está, en este sentido, libre de pecado. Me gustaría, por ejemplo, saber qué piensas en relación a los antiguos desmanes contra otros países de Europa oriental, o contra Afganistán, de la ya desaparecida URSS; qué te parece el padecimiento al que se ha sometido al Tíbet a cargo de China o cuál es tu postura con respecto a lo que fue la difusión continental en los sesentas –y también ahora- de los movimientos insurreccionales de orientación comunista que tantas lágrimas y dolor nos han costado en toda Latinoamérica a cargo de las peludas –y siempre metidas en todo- narices de Fidel Castro. Siguiendo tu lógica y la Houtart –otro de los detractores del “imperialismo capitalista”- si el imperialismo es “la dominación política de un Estado sobre varios otros para establecer una hegemonía política, económica y cultural”, me gustaría saber si no ves como contradictorio que con una mano acuses a los EE UU de “imperialistas”, de irrespetar la “soberanía de los pueblos” y, con la otra, avales que nuestro Gobierno quiera “exportar” a otros países su “revolución bolivariana” –es decir, su modelo ideológico, que ni de “modelo” ni de “ideológico” tiene mucho- y que se meta continuamente en los asuntos internos de Honduras, Bolivia, Chile, Nicaragua, Ecuador, Argentina o Brasil, por sólo mencionar algunos. Te lo escuché decir el martes pasado cuando expresaste con absurda complacencia que “esta ya no es sólo una revolución de Venezuela”, con lo que implicas que te parece bien que lo sea, o que intente serlo -de manera harto “imperialista” por demás- de otras naciones. Veo que te parece mal, por una parte, que los legisladores norteamericanos hablen sobre Venezuela, pero no que los nuestros hayan consagrado varias “sesiones especiales” en los últimos tiempos para “ocuparse” de lo que pasa en otros países mientras en nuestra nación continuamente estallan graves escándalos de narcotráfico y de corrupción que se nos hace creer que “no existen” o ya vayan para más de 20 mil los muertos este año a cargo de la violencia. Crees que está mal que en el presupuesto del país del norte se reserven partidas especiales para ocuparse de los temas de nuestro país y de la región, pero nada dices de que sólo para el consumo presidencial se destinen para el 2011 más de mil millones de bolívares “fuertes” para “agua”. Eso por no hablar del contraste evidente entre lo que se invertirá para intervenir en otros países, o en juguetitos de guerra, y lo que se invertirá en 2011 acá en salud, educación, seguridad o vivienda. Y creo que no tienes hijos, pero si los tuvieras, ¿dónde vivirían? ¿En Caracas o en alguna ciudad “capitalista” del norte? Mi hija vive acá, conmigo ¿te atreverías tú a tener hijos –qué Dios te bendiga con ellos- y a traerlos a este “mar de la felicidad” donde a la gente se la asesina por un celular o por un par de zapatos? Creo que no.

Estafa revolucionaria

Y es que tu pecado, como el de todos los que suscribieron ese esperpéntico bluff –tú, por tu inglés bien cultivado, sabes a qué me refiero- que resultó ser el “Manifiesto antiimperialista en defensa de la Patria”, es la incongruencia. No pones tu plata dónde está tu boca, como no la ponen los que te acompañaron en tus quince minutos de fama. Son todos ustedes “revolucionarios”, pero de la boca para afuera nada más. Lo veo todos los días. Tanto hablar gamelote de los abusos –que sí los hay y los hubo- de EE UU en Irak, tanto cuestionar el “imperialismo guerrerista” norteamericano para luego seguirles vendiendo el petróleo que ellos necesitan para que sus máquinas bélicas se muevan y hagan lo que hacen. Tanto cuestionar el consumismo y los privilegios para, como muchos “revolucionarios” –Eva, las mentiras tienen patas cortas- volar feliz al norte cuando les toca en Primera Clase de “American Airlines”. Tanto cuestionar el dinero y sus maldades para luego –como por ejemplo le pasó a Calixto Ortega- ser fotografiado en la muy capitalista ciudad de Las Vegas, ir a un concierto de Madonna –como se vio que han hecho los familiares más jóvenes de Chávez- o ser visto en otros lares conociendo, disfrutando y comprando lo que muchos acá ni siquiera se atreven a soñar. No te veo Eva vestida con ropas hechas en las “cooperativas socialistas” ni con zapatos producto de alguna empresa “liberada” víctima de alguna “expropiación socialista”. Cuenta tú cuántos “revolucionarios” en estos últimos años han llorado como plañideras cuando el “imperio” les niega –con justas razones además, al final se dicen sus “enemigos declarados”, por lo que no pueden esperar de los norteños flores- la visa para que puedan llevar a sus hijos a Orlando a retratarse con Mickey Mouse o a comprar para sus hijas los disfraces de las princesitas ¿Has visto, por ejemplo, los relojes de Chávez? ¿Sabes cuánto se destina de nuestro dinero a su higiene personal anualmente? Indaga Eva. Si eres de verdad “revolucionaria” te llevarás algunas sorpresas.

Revolucionaria “gozadera” de las mieles del “imperio”

No se puede exigir que se limite el financiamiento foráneo legítimo a nuestras ONGs o a nuestros activistas de DDHH y a la vez ser americana y recibir gustosa el financiamiento, también “foráneo” en tu caso, de nuestro Gobierno. No se puede ser “revolucionario”, “antiimperialista” y “bolivariano” y a la vez gozar de las mieles del “imperio”, andar mendigándole sus visas para viajar a éste o seguir recibiendo su dinero a cambio de petróleo. Eso, si a la lógica vamos, les hace hipócritas cómplices de lo que más deploran. Si tanto les disgusta el “imperio” –a ti y a los que te bailaron el agua el martes- ¿por qué no quemaron éstos de inmediato sus visas, los que las tienen, para ser consecuentes con lo que pregonan? Si para ti EE UU es el “imperio del mal” ¿por qué no renuncias a tu nacionalidad norteamericana? No me vengas con cuentos Eva. Lo tuyo es simple comodidad, simple y muy capitalista lucro fácil a costa del sufrimiento ajeno. “Explotación del hombre por el hombre”, pues

“Odioso para mí, como las puertas del Hades, es el hombre que oculta una cosa en su seno y dice otra”
Homero


Gonzalo Himiob Santomé / Twitter: @HimiobSantome


http://www.diariolavoz.net/seccion.asp?pid=18&sid=1050&notid=347510

miércoles, 17 de noviembre de 2010

el vengador errante

Opinión
Roberto Giusti
El Universal / ND


El vengador de la clase media

Intenta engañarte de nuevo cuando sabes que ni casa tendrás si se perpetúa en el poder

Si hay un sector de la sociedad que siente temor, desconfianza y otros sentimientos menos agradables por Hugo Chávez, ese es el de la clase media. Después de la luna de miel del 98, cuando el ex golpista (¿acaso esa condición se pierde una vez obtenida?) terminó de quitarse el disfraz de corderito clintoniano (tercera vía), de nacionalista tipo Pérez Jiménez y/o de ángel vengador contra los corruptos (no nos engañemos, también había revelado su lado oscuro y pocos lo quisieron ver), los venezolanos instalados en uno de los nichos sociales y económicos, intermedios, más extendidos y mejor equipados del continente (en todo sentido), descubrieron que habían sido vilmente engañados.

¡Oh, sorpresa!, el golpista era un golpista, el trovador que entonaba himnos pueriles a la isla de la felicidad, inspirado en Alí Primera (Cuba es un paraíso, para el cubano, señores), terminó siendo, Dios Santo, de verdad, un comunista recién salido del clóset. El hombre que prometió jamás establecería un control de cambios y ofrecía a los incautos un "capitalismo con rostro humano" usaba a los economistas de la cuarta para quedarse con todos los reales y negarte tus dólares viajeros, se metía con tus hijos y su educación, se besaba con Saddam Hussein, le daba posada a los faracos, te gritaba pitiyanqui, vendido, apátrida y amenazaba, cada vez que amanecía con la puntada del resentimiento en el punto crítico, con no dejar "piedra sobre piedra" en el Este de Caracas.

Pero el mal ya estaba hecho, votaste por él la primera vez, incluso en la segunda y a la tercera ya estaba cómodo, atribuyéndole a los adversarios lo que él era y nunca dejaría de ser.

Pues bien, le devolviste el resentimiento pelo a pelo, ojo por ojo y diente por diente, al menos, retóricamente, tal cual lo hacía él, hasta quedarte sin pelos, ni ojos ni dientes y él todavía allí, cómodo y amenazando con ir más allá, confiscando todo lo que se le atravesaba, quitándote el trabajo, persiguiéndote con listas de Tascón, obligándote a desfilar vestido de rojo, bajándote el nivel de vida, sometiéndote al hampa, limitándote el horizonte cultural, las ganas de mejora, la autoestima y pintándote un sombrío futuro de opresión y lúgubre colectivismo estatal.

Pero el 2D (2001) sufrió su primer revolcón electoral, el 26S (2010) el segundo (sin contar el revolconcito del 2008) y descubrió, bien tarde, que necesitaba los votos de la clase media y entonces, luego de rebuscar en su cajón de sastre se sacó de la chistera el tema de las constructoras. Incapaz de crear algo, acudió al manoseado expediente del robo legal, les entregó unas cuantas viviendas a los afectados y con eso espera engañarte de nuevo, cuando ya sabes que ni casa tendrás si se perpetúa en el poder.

rgiusti@eluniversal.com

otra opinion

Opinión
Pedro Lastra
ND


La caja de Pandora está abierta


La historia es tan insólita como nuestro universo: de donde menos se piensa, salta la liebre. ¿Quién hubiera creído que una simple declaración de un mayor general, hasta entonces sólo conocido como el correveidile de Rodríguez Chacín y Hugo Chávez en el comercio de armas con las FARC, y con las que creía salvarse el pellejo ante los peligros mortales que le acechan desde que Walid Makled lo señalizara como uno de sus Kingpin – el Rey Pillo que de las comiquitas ha saltado a la nomenclatura de la DEA para designar a las piezas claves en el tráfico de drogas - iba a terminar empujando algunos metros más a su comandante en jefe hacia el abismo que le espera?

Aún no se esclarece – y posiblemente sólo se sepa cuando él y los suyos descansen el sueño de los justos en alguna prisión estadounidense – las razones que lo llevaron a montar este monstruoso guirigay, del que en una primera lectura parece salir fortalecido con el nombramiento de general en jefe. Unos dicen que obedeció órdenes de Hugo Chávez, quien le habría escrito el guión. Y quien a su vez habría recibido órdenes en La Habana de empujar la crisis a su máxima potencia para terminar de una buena vez con el jueguito de la candela. Según esta versión, consciente los Hnos. Castro de que Chávez no llega al 2012 o, de llegar, lo hace con las patas tan quebradas, que recibiría una paliza de órdago, le recomiendan terminar por dar el golpe de Estado. Más vale dictadura en la mano que cien elecciones volando. De allí el consejo del rey de las crisis, Fidel Castro, de provocar todos los demonios abriendo la caja de Pandora y reventar el frágil paquete de la democracia venezolana. Jorungando el nido de avispas de las FAN con el palito de uno de sus más desacreditados sigüises. A ver quién se asoma.

La segunda lectura es más sofisticada. Con el antecedente del fusilamiento de uno de los Hnos. de la Guardia y del general Arnaldo Ochoa Sánchez en la memoria, mandados a fusilar sin más trámite en 1989 por Fidel Castro para sacarse de encima las graves acusaciones de estar incurso en la red del narcotráfico, Rangel Silva y sus conjurados en el crimen hecho público por Makled, habrían advertido la posibilidad cierta de que Chávez repitiera el expediente de Fidel Castro, usándolos como chivos expiatorios y condenándolos – por ahora – a gordas condenas de cárcel en juicios sumarios. Siguiendo este guión, los 15 generales de Walid Makled habrían adelantado la jugada y comprometido en ella al propio Hugo Chávez, pillado a milímetros de la almohadilla.

Me inclino por la primera interpretación, que calza a la perfección con la necesidad de radicalizar, única salida que le va quedando al descentrado teniente coronel, ya literalmente al borde del abismo. Si usted, querido lector, cree que los escándalos se acabaron, está profundamente equivocado. En Venezuela, según una dialéctica de la corrupción instaurada durante la Cuarta República, todo nuevo escándalo es mayor que el anterior y automáticamente menor que el que le sigue. Cuando el del Metro – con sus 35 detenidos – medio tapó el de los alimentos y medicinas podridas y éste el de los apagones y aquel el de los cortes de agua y todos los de la terrorífica inseguridad, la carestía de la vida y el desempleo, sale este inefable mayor general a destapar la caja de Pandora de nuestros más resguardados secretos: los que avergüenzan a nuestra más importante y trascendente institución republicana, las fuerzas armadas.

El golpe del 4F y la larga y tortuosa conspiración, con sus secuelas de cómplices y utilitis entre generales, ministros de defensa y otras yerbas de tanques y ametralladoras, ha puesto de manifiesto la putrefacción del principal sostén del teniente coronel, convertida en mala hora en su privilegiado partido político. Y ha empequeñecido hasta la nanotecnología a la rebelión del 11 de abril, que una campaña mediática financiada con miles y miles de millones de dólares desde las salas situacionales de Miraflores y algunos estudios piratas hollywoodenses pretendió usar como tapadera del golpismo chavista. Hoy por hoy y luego de destapada la olla del 4F, ¿quién se acuerda del 11 de abril?

El primer hito de esta historia putrefacta de tanques, aviones, barcos y cocaína lo puso Walid Makled. El segundo, Henry Rangel Silva. El tercero y por ahora definitivo, lo acaba de poner el General Santiago Peñaloza. Cuya carta abierta al presidente Hugo Rafael Chávez Frías es un documento histórico que vuelve a poner a valientes y cobardes, a traidores y leales, en sus justos pedestales. La caja de Pandora está abierta. ¿Quién, cómo y cuándo la cerrará?

carta al presidente

Ciudadano Hugo Rafael Chávez Frías
Presidente de la Republica
Sr. Presidente,
No lo veo desde hace casi 21 años, cuando nos reunimos en mi despacho de Comandante del Ejército. Como recordará, lo detuve porque tenía pruebas feh-cientes que Ud. preparaba un golpe para el día 6 de diciembre de 1989.
En esa oportunidad, un grupo de altos funcionarios y oficiales, actuando como cómplices, abogaron ante el presidente, quien decidió dejarlo en libertad «por falta de pruebas». El mismo plan, entonces abortado, Ud. lo repitió el 4F de 1992, luego de mi retiro. Ese golpe fallido lo convirtió en una figura nacional y lo llevó a Miraflores legalmente. Antes de esas elecciones ningún militar amenazó con desconocer su posible victoria. Si alguno lo hubiera hecho, yo mismo hubiera salido a defenderlo a Ud. de ese chantaje.
Hoy en día, cumplidos 70 años, me preocupa su decisión de defender en público al Mayor General Henry Rangel Silva y ascenderlo in situ, como se hace con quienes han ejecutado un acto heroico con peligro inminente de su vida. Este indigno general lo único que hizo fue jactarse de estar amancebado con Ud. y su causa. Para él, la lealtad a la patria es a medias mientras con Ud. es total. Ante esta escandalosa exhibición de
adulancia, Ud., en lugar de degradarlo, corrió a ascenderlo. Antes de que la adulación del general Rangel Silva fuese premiada con el impúdico ascenso, escribí un artículo en «El Nuevo País» criticando las desdichadas declaraciones del mencionado general. Luego, un coro de protestas desde diferentes trincheras permitió palpar el descontento popular. Ud. no lo percibió porque hace
tiempo perdió sintonía con el pueblo. En vez del grotesco ascenso, el mal ejemplo merecía una sanción y destitución. Pero esto no es lo que más preocupa. Debemos acostumbrarnos a la idea de que pronto tendremos docenas de generales en jefe y así el grado que mereció Simón Bolívar, nuestro gran secuestrado, se devaluará al igual que nuestra moneda. Lo grave es que Ud. confirme de viva voz su decisión de desconocer el resultado de las elecciones presidenciales del 2012 si éste le es adverso. Semejante abuso de autoridad no puede pasar desapercibido, aunque las autoridades competentes no tomen las medidas para condenarlo. Con este acto, Sr. Presidente, Ud. le ha declarado de facto la guerra a más de la mitad del pueblo venezolano.

Aunque tengo los setenta años de aquel personaje histórico-legendario, no pretendo ser un moderno Alonso Andrea de Ledezma, enfrentando a los bucaneros ingleses que saquearon Caracas en 1595. Ni siquiera tengo un viejo yelmo y armadura, ni una lanza oxidada. Pero tengo mi conciencia y me considero en el deber de hacerle frente y recoger el guante retador con que Ud. nos abofeteó a los ciudadanos venezolanos. Nadie me ha seleccionado para ocupar esa posición, pero como soldado de la república considero mi deber asumir el riesgo. Después de todo, a Ud. tampoco nadie lo ha autorizado a ejercer chantaje electoral. Estamos en igualdad de condiciones, salvo que Ud. es Goliat. Soy un viejo que siendo todavía adolescente juró defender las instituciones hasta perder la vida si fuera necesario, y sigo fiel a ese compromiso. Ya viví bastante y la muerte no me asusta.

Por lo expuesto, Sr Presidente, le notifico que las fuerzas democráticas de la patria lo retan a enfrentarse en las metas electorales y aceptar el triunfo del que obtenga la mayoría. Si trata de poner en práctica sus amenazas del uso de la fuerza antes o después de esas elecciones, resistiremos con las mismas armas que Ud. utiliza. También le participamos que el nombramiento del general Rangel, o cualquier otro oficial señalado como presunto narcotraficante, como ministro de la defensa para el momento de las elecciones, será tomado como una señal de que Ud. sigue con los planes de desconocer los resultados electorales en el 2012.

Le advierto que sólo habrá paz si respeta la Constitución y a la voz de la mayoría del pueblo. Hasta ahora sus constantes violaciones de la Carta Magna se han pasado por alto, pero la acumulación de desacatos se está haciendo intolerable. El posible aborto de las elecciones del 2012 o el desconocimiento de un resultado adverso a sus intereses políticos liberará los demonios que están represados. Los venezolanos queremos la paz, pero al mismo tiempo rechazamos las dictaduras de cualquier color. A partir de este momento estamos velando las armas de la democracia y al mismo tiempo rogamos porque no se desate una guerra civil.

No pretendo ser el jefe de un movimiento en su contra, sólo soy un humilde mensajero. Sobran líderes jóvenes, inteligentes y corajudos dispuestos al combate. Espero que esta tragedia no sea necesaria. El ejército forjador de libertades no va a asesinar venezolanos. Esto no es una amenaza de golpe o el inicio de una conspiración, es un campanazo para que Ud. entienda
que estamos dispuestos a luchar por la libertad y a impedirle consolidar una dictadura siguiendo las líneas que recibe de La Habana. No queremos que el sueño de Bolívar se convierta en una pesadilla castrista. En aras de un poder pasajero y de una ideología obsoleta y ruinosa Ud. no puede iniciar una guerra fratricida que lo convertirá en un monstruo ante la historia. No llame más a Fidel para pedir instrucciones. Dedíquese a gobernar a Venezuela con los venezolanos.

La gran unidad hispanoamericana nunca se logrará con el modelo comunista. Es más, si sigue el patrón de gobierno de la Sra. Bachelet o de Lula hasta podría cambiar la tendencia actual y ganar en el 2012. Le garantizo que si Ud. gana limpiamente, su triunfo será reconocido como debe ser. Vuelva a ser venezolano, deje morir a Fidel en paz para que Venezuela pueda vivir
en concordia.

Le prevengo de reaccionar con los habituales insultos y descalificaciones. Siempre estaremos listos para actuar como personas racionales y decentes, de acuerdo a lo que nos enseñaron en la academia que nos formó como ciudadanos y soldados. Entierre el hacha de la guerra dirigida desde Cuba. Venezuela lo reclama.
Atentamente,
General de División
Carlos Julio Peñaloza Zambrano.

TOMADO DE WWW.LAPATILLA.COM (PUBLICADO EN NOV. 15.2010)